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domingo, 26 de marzo de 2023

Un viaje por países hispanohablantes

Los estudiantes de Ter BTS SAM de Interfor presentaron la cultura de algunos países hispanohablantes. Incluyendo un curso de baile de merengue impartido por Anaïs, Un baile tradicional de Républica Dominicana.

jueves, 19 de marzo de 2020

lunes, 22 de julio de 2019


El error y control de la enseñanza y del aprendizaje





¿Qué es un error? la RAE define el error como  1.Concepto equivocado o juicio falso, 2. Acción desacertada o equivocada, 3. Cosa hecha erradamente. pero el concepto de error ha ido evolucionando a nivel linguistico y psicológico.


Un sin número de preguntas surgen a raíz de este tema: ¿Es necesario corregir?, ¿Cómo corrijo?, ¿Cuándo corrijo?, ¿Qué corrijo?, ¿Quién corrige?,  ¿Por qué mis alumnos cometen errores?, ¿Qué hay detrás de los errores? ¿Soy capaz de detectar un error?. 


Es sumamente necesario corregir los errores de inmediato, ya que con esto separamos dentro de los objetivos, lo que está bien de lo que está mal, evitando que los errores se vuelvan hábitos. Esta corrección debemos hacerla con sutileza y tacto para que el alumno no se sienta presionado, sabiendo si el tipo de error que ha cometido el alumno está en el nivel de su desarrollo de competencia lingüística. 

debemos ver siempre las partes positivas de los errores, pues detrás del error hay una duda que queda aclarada, y a lo mejor no solo para quien cometió dicho error, sino, para cualquier otro alumno que tenía la duda o simplemente no se atrevía a preguntar.

Errar es de humanos, y el profesor también comete errores metodológicos que inducen errores en el estudiante. El profesor debe establecer un código sencillo que el alumno sepa decodificar, con esto les damos tiempo para autocorregirse, 

No es necesario corregir sobre un tema que los alumnos no hayan visto todavía. Los alumnos van a cometer errores dependiendo la estrategias que ellos ponen en marcha. El alumno va a cometer errores pragmáticos, fonéticos, morfológico. socioculturales etc.



sábado, 20 de julio de 2019


Con Carmen iniciamos hojeando unos manuales, para evaluar las ventajas y desventajas de utilizar esos manuales, las ediciones de estos libros iban desde 1986, el manual que nos tocó a Ana y a mí, fue el peor ja, ja, ja (español 2000).

Eran libros muy obsoletos, muy mecánicos, y con actividades poco reales. a medida que íbamos avanzando en los años de las ediciones, los libros iban mejorando, eran libros que orientaban, con objetivos más claros y textos auténticos.

Si bien es cierto que hoy día, el internet nos proporciona “todo” el profesor debe y tiene que usar un manual, un manual adaptado a sus alumnos de acuerdo con sus edades y niveles, ya que gracias al manual sus clases irán avanzando de una forma organizada.

Una clase de lengua, no está basada solo en gramática, comprensión escrita, vocabulario, etc. también debemos incluir la cultura, esa cultura que hace descubrir el arte, la comida, la música etc. Así como también la “Kultura”, ese lenguaje propio de cada país, estas dos culturas son puntos que enriquecen de una forma u otra la lengua meta. Cada persona es dueña de su propia cultura, pero nosotros como profesores de una lengua tan rica y segunda lengua más hablada en el mundo, debemos ser portadores de la cultura hispanoamericana.






Carmen también nos dio algunas pautas para las dinámicas en el aula, fue muy divertido, me encantó la dinámica del lenguaje no verbal, vimos como el mismo gesto variaba de significado según el país. 




jueves, 18 de julio de 2019

Actividades comunicativas de la lengua, 1

El jueves tuvimos el placer de conocer a Laura Gil-Merino, quien nos habló de la expresión e interacción oral,  dándonos pautas que debemos conocer y poner en práctica en nuestras clases.




Para dar una clase oral debemos crear un buen ambiente en el aula, y esto lo crea el profesor con su actitud, este ambiente motivará la participación de los estudiantes. Y Laura nos decía que en una clase oral “El primero que debía tener ganas de hablar era el profesor”.



Es difícil aprender una lengua, pero… si quien enseña la lengua lo hace con cierto humor, le damos confianza a nuestros estudiantes, estarán motivados, memorizarán mejor, tendrán menos estrés... tanto ellos como el profesor saldrán beneficiados.


A parte de tener una buena actitud y humor, debemos buscar y tener un contacto visual con cada estudiante, como si fuéramos un ventilador que gira de derecha a izquierda, buscando la aprobación de todos y haciéndoles ver que todos son importantes.





Un profesor debe anunciar todo lo que se hará en el aula, explicando con claridad la consigna y el objetivo de la actividad que se llevará a cabo. 








Planificar es de suma importancia, siempre hay que preparar las clases y no llegar a improvisar,  preparar los materiales que vamos a utilizar, coordinar las pausas, etc. y luego con el tiempo y la experiencia, tendremos el tiempo en nuestra cabeza. (hasta magos nos volveremos, Laura nos lo demostró, porque sin mirar el reloj, supo decirnos aproximadamente que horas eran en ese momento 👀).





Trabajar diferentes tipologías textuales y diferentes contextos sabiendo que no todos los temas se pueden tratar, Los temas deben despertar  el interés del estudiante. 






El profesor debe ser el moderador o nombrar a alguien del aula para que lo sea, para que cada estudiante intervenga de una manera ordenada, dándole oportunidad a todos, sabiendo que hay alumnos que son tímidos y otros muy extrovertidos; para que el debate fluya de una manera tan natural que se pierda por momento la realidad de que estamos en el aula.






Al final de la clase debemos sacar conclusiones, guiándoles a que utilicen la gramática y  el vocabulario, resaltando los marcadores pautados para la clase.













miércoles, 17 de julio de 2019

TECNOLOGÍA Y CREACIÓN DE MATERIALES PARA LA CLASE.


La última sesión del miércoles, animada por Jesús, fue muy divertida, ¡hasta el calor olvidamos!

Jesús nos enseñó que podemos utilizar la tecnología a nuestro favor, con actividades que son divertidas y lúdicas, manteniendo al estudiante atento al “juego”, pero a la vez haciéndolos reflexionar.

Además de descubrir algunas herramientas que nos permiten crear materiales para la clase,  llevamos a la práctica el Kahoot y Padlet.


Utilizar estas herramientas en el aula nos llevaría a cambiar el ambiente de la clase y gracias a esta gamificación estoy casi segura de que los estudiantes tendrán mejores resultados. Es una competencia clave utilizar la tecnología en el aula y nos decía Jesús: "Te formas o te forman"; pues muchas instituciones se están preparando para estar a la vanguardia.
Me gustó muchísimo Kahoot, y desde ese miércoles tengo muchísimas ideas, que las concretizaré “à la rentrée”. Mientras tanto me tomé un tiempecito para explorar kahoot, y he preparado un pequeño cuestionario. ¿Se animan a hacerlo?